Anuncio de cese de violencia de ETA

Por fin ETA anunció el pasado jueves, el cese de su actividad armada, terrorista, violenta, en un paso más para buscar la paz en el País Vasco, una convivencia alterada, casi en su totalidad, por ellos,durante décadas.

Pero no es suficiente una declaración para encontrar soluciones a todas las heridas. Hay un proverbio que dice: “si me engañas una vez es culpa tuya, si me engañas dos veces ya es culpa mía”. No seré yo el que se deje engañar dos veces por este atajo de mierdas que tantas veces se han limpiado el culo con nuestras súplicas y con nuestras manos pintadas de blanco.

No debemos perder el norte, ni despistarnos, ni dejar de desconfiar de esta gentuza desaliñada. Hasta que no entreguen las armas, pidan perdón, se disuelvan oficialmente y se entreguen. Al enemigo ni agua… porque aunque ahora dejen la pistola bajo la almohada, la siguen teniendo cargada, siguen sabiendo utilizarla y siguen siendo el enemigo.

No es de recibo, para los de los miembros de ETA, que sigan apareciendo con su teatral apariencia tapada y tan antigua. No es por seguridad por lo que aparecen con esa imagen tan fantasmal, es por mantener una manera particular de dirigirse al mundo mundial, que realmente les está haciendo un flaco favor incluso a ellos, que como asesinos no deberían tener favores.

No es lo mismo el cese definitivo de la actividad armada que plantear la disolución. No es lo mismo eso que dicen en un comunicado flojo, que reconocer que su violencia ya no es el camino, que ya han dejado de creer en su violencia, que es el momento de pedir perdón, de rectificar, de tener más concordia entre todos los vascos.

 No podemos caer ni en la autocomplacencia, ni en el conformismo, ni siquiera en la ilusa felicidad del perdón y del mirar sólo hacia delante. ETA sigue siendo una organización criminal que ahora quiere reconvertirse a un partido político subvencionado por esos españolitos gilipollas de los que desean independizarse. Han descubierto lo bien que se vive de alcalde, de concejal, de presidente de una diputación, de alto cargo de libre disposición, de vicesecretario de lo que sea, de asesor y de director general… lo han puesto en la balanza con las pistolas, y la balanza se ha inclinado hacia las nóminas subvencionadas, como es lógico.

Aunque no nos gusten las formas ni los disfraces, hay que huir de listos que se creen que las soluciones finales y definitivas están ya sobre la mesa y que son parte de la gestión de unos pocos. Las soluciones finales son de todos los vascos, de todos los que hemos vivido en nuestras ciudades la violencia terrorista, de todos los que han sabido tener paciencia en la seguridad de que la lógica de todo tipo de leyes democráticas, al final triunfaría.
 

En una entrada anterior que dedique a esta banda, publique la imagen de los encapuchados y por sugerencia de mi padre la eliminé. Esta vez no quiero caer en esto, pero si publico la foto de la persona que mas me estoy acordando desde el pasado jueves, de nuestra familiar Conrada Muñoz.

Ella junto con Miguel Ángel Blanco, son parte de los ochocientos y pico muertos de estos personajes que ahora parece que nos perdonan la vida.

Me gustaría dedicar esta entrada a los familiares de todos estas personas que tanto mal le habían hecho a estos asesinos y en especial a la familia Bolivar Muñoz.